#MacabroRecomienda: Get Out: Hacer al cine de horror grande otra vez
Por Pablo Rendón
El cine de terror ha sido, a lo largo de los años, catalizador de los miedos más profundos que nos aquejan como seres humanos. Así pues, una corriente como lo es el expresionismo alemán da testimonio de la incertidumbre por la que atravesaba la civilización occidental luego de la primera guerra mundial. El cine de terror adolescente, tan en boga en los años 80’s, utiliza el miedo como método moralizador a propósito de ciertos monstruos, en extremo reales, de los que hasta entonces se sabía muy poco, como el VIH/SIDA. Y así podríamos continuar con muchísimos ejemplos.
¿Qué es lo que ocurre hoy? El racismo vedado, con ciertos tintes de political correctness, se ha vuelto el pan de cada día; con la finalidad de salvaguardar los intereses nacionales (llámese Estados Unidos, Inglaterra, Grecia o hasta Francia) se recurre a medidas extremas que restringen las libertades de todo aquél que sea ajeno a «nuestra» cultura, pero que a ojo de sus gobernantes «no son racistas». El escritor y periodista afroamericano Ta-Nehisi Coates es muy claro al señalar que es ese precisamente el problema de la época actual: el racismo «no existe», y le sigue una conjunción adversativa (¿Cuántas veces no habremos escuchado a un amigo o familiar decir cosas como «Mira, yo no soy racista, pero…»?).
No es de extrañar que hoy el miedo a la otredad sea tema de inspiración para una cinta de horror como lo es ‘Get Out’ (2017), primer trabajo como director de Jordan Peele, quien hasta ahora se había dedicado exclusivamente al género de la comedia tanto en televisión (Key & Peele, MADtv) como en su vertiente cinematográfica (Keanu, 2016). El actor británico Daniel Kaluuya (el mismo que da vida a Bing, en el episodio “Fifteen Million Merits” de la serie Black Mirror, uno de los más memorables) protagoniza esta cinta —¿acaso distópica?— que mantendrá al espectador, durante sus casi dos horas de duración, al filo de la butaca. No, no se trata de una exageración, la película cuenta con una aprobación del 99% por parte de la audiencia en la página Rotten Tomatoes.
La premisa de la cinta es muy sencilla: luego de cinco meses de relación, Chris Washington (Daniel Kaluuya), un joven fotógrafo, decide emprender un viaje de fin de semana para conocer a los padres de Rose Armitage (Allison Williams), una chica blanca proveniente de una familia acomodada. Un pequeño detalle ha sido pasado por alto, ella no ha informado a sus padres que Chris es negro. Esta situación resulta incómoda para nuestro protagonista, pero Rose insiste en que sus padres «no son racistas», y habrán de recibir a Chris con la mayor de las atenciones. Cualquiera que haya visto ‘Guess Who’s Coming to Dinner’ (Stanley Kramer, 1967), podrá intuir lo que sucede a continuación. Claro, con un pequeño —gran— twist porque no se trata de una comedia, sino de lo que ha sido calificado por la crítica como un «clásico moderno del cine de horror».
Por azares del destino, la casa de los padres de Rosie, Dean y Missy Armitage (Bradley Whitford y Catherine Keener), un neurocirujano y una psiquiatra respectivamente, será sede de un curioso encuentro familiar en lo que se supone es una reunión celebrada anualmente. Aquí Chris es víctima del constante escrutinio por parte de los familiares de su novia, siempre tras el delgado velo de la corrección política. Sumémosle el desconcierto ante el extraño comportamiento de la servidumbre negra, quienes parecen haber olvidado todo código de identidad —o vínculo— con su raza. ¿Qué siniestro secreto se oculta tras este inesperado encuentro?
De acuerdo a Universal Pictures México, la fecha de estreno de la cinta en nuestro país está programada para el 26 de mayo bajo el título de ‘¡Huye!’. Se trata, sin lugar a dudas, de una película más compleja de lo que parece y que bien valdría ver como una lectura de nuestra realidad, cada vez más absurda, distópica y tan cercana al horror.